Escrito por Rosa Membreño
A sus 43 años, al estadounidense Jason Wyatt Walters se le ve jugando con el espíritu y alegría de un joven en la Liga Asociación de Clubes de Baloncesto (ACB).
Jason corre, salta, cae y se levanta como el ave fénix para encestar sus tradicionales canastas de tres con los Tigres de la Universidad de Managua, que disputan la serie semifinal con los Leones.
Jason practicó futbol y beisbol, pero fue flechado por el baloncesto desde los 15 años.
“El baloncesto ha sido mi vida. Antes jugaba con mucha presión, pero ahora trato de disfrutarlo, creo que puedo jugar cinco años más”, dice el norteamericano de ojos celestes, nacido en Kansas City el 20 de diciembre de 1970.
Jason tenía 25 años cuando vino a jugar a Nicaragua gracias al enlace con Richard Mosquito y debutó con el conjunto Costa Caribe en 1996. Luego jugó con los Tiburones, la UAM y los Tigres de la UdeM.
Pero en el 2009 hizo una pausa en su vida.
“Pensé que no podía jugar ya, que había terminado mi carrera, perdí mucho tiempo, pero extrañaba jugar”, confiesa Walters, quien se describe como una persona divertida, además tiene una licenciatura en deportes.
RESPETADO
“Es el jugador más espectacular e impresionante que ha venido, todos querían verlo por sus triples y clavadas, es muy disciplinado, un ejemplo a seguir”, señala Luis Pavón, presidente de la Liga ACB.
“Es el Michael Jordan que ha venido a Nicaragua, humilde, me fijaba cómo tiraba y aprendí, siempre me dice que la práctica hace al maestro”, expresó el pinolero Alvin Camacho, de los Leones.
“Me entristece envejecer y no poder jugar como antes, pero trabajo duro para rendir. Nicaragua ocupa un lugar importante en mi vida, es mi segunda casa, tal vez viva aquí”, apunta Walters, quien aconsejó a la juventud entrenar duro y practicar muchos tiros.
Esta historia se publicó en el Periódico HOY http://www.hoy.com.ni/2014/08/24/el-gigante-de-los-ojos-celestes/