Escrito por Rosa Membreño
Hace cuatro años, cuando Connie Aguilar conoció al big leaguer Everth Cabrera en Portland, Oregón, Estados Unidos, no era el momento más apropiado para que floreciera el amor.
Pero al igual que la planta que crece en el terreno más difícil tiene mayor fuerza, el sentimiento que despertó entre Cabrera y Aguilar, tuvo la suficiente intensidad para vencer los obstáculos.
“Llegué en un momento duro a la vida de Cabrera, porque se había quebrado un hueso de su mano izquierda. Su carrera no ha sido fácil. Lo he visto llorar ante las complicaciones y salir a luchar pese a las adversidades. Por eso cuando lo veo triunfar siento un orgullo inmenso”, expresa emocionada Connie, de 25 años.
Fue en el 2009 cuando ambos se vieron por primera vez gracias a un grupo de amigos y desde entonces quedaron flechados.
“De Connie (Aguilar) me impresionó, más que su belleza, su forma de ser. Desde entonces siempre me ha apoyado, además me da buenos consejos. Ahora hay más amor y mejor comunicación, ha sido un gran apoyo en mi vida”, explica Cabrera, de 26 años.
Tras ese primer encuentro, el interés de Everth aumentó y logró que ese mismo año Connie, quien estudia Comunicación, conociera su natal Nandaime.
“En noviembre del 2009 me pidió que viniera a Nicaragua, fuimos a Nandaime y conocí a su familia y amigos. Todo eso fue especial y desde enero del 2010 estamos juntos”, agrega Connie.
Según Connie, “nunca en mi vida había conocido a un nicaragüense. Me atrajo su sonrisa y físico, pero más que todo su trato. Aún me sigue tratando como una princesa”.
CLAVE
Connie confesó las claves para mantener su amor.
“Lo difícil de una relación con un pelotero son las fanáticas y porque él —Everth Cabrera— está fuera de la casa cuando anda jugando. Pero hay mucha confianza, no soy tan celosa y creo que eso ha ayudado bastante. Al igual que él, vengo de una familia pobre y hemos luchado mucho”, confesó Connie.
Elián, primogénito de la pareja y quien acaba de cumplir un año, ha llenado de luz y alegría las vidas de Cabrera y Connie, no obstante, el pinolero ya desea una niña.
Este nota se publicó en el Periódico HOY el 12 de febrero de 2013 http://www.hoy.com.ni/2013/02/12/se-rob%C3%B3-su-coraz%C3%B3n/